miércoles, 14 de septiembre de 2011

Con algo de perseverancia y mucho de ayuda

Hola a todas! Qué alegría volver a escribir esta vez para contarles un poco de mi experiencia reciente. Pero para eso, necesito hacer algo de historia y comienzo por decirles algo: nunca fui una persona con problemas de salud ni sobrepeso. La naturaleza me dió la posibilidad de comer de todo sin problemas durante la mayor parte de mi vida sin que esto tuviera consecuencias de ningún tipo... como de todo (o casi) aunque siempre tuve debilidad por lo salado y por lo "panoso", adoro el pan, pizza, tarta, sandwich, empanadas... todo esto me encanta.


La foto con mi sobri hermosa (qué grande está hoy mi Maqui!!) es de fin del 2004, después de esto tuve a Agus en el 2005 y visitando Dieta Club volví rapidamente a mi peso. Luego vino Fede y allí comenzó el cambio... al principio de a poco pero luego fue muy rápido y notorio. No sólo no podía bajar sino que acumulé kilos en un período de dos años... más exactamente, acumulé 17 kilos!!!
En marzo de este año 2011, cumplí años de casada y me ví en estas fotos... tomé coraje y encaré la recomendación de mi doctora (ginecologa, obstetra y clínica ad hoc) Isabel: dejé los hidratos.




También por sus indicaciones y gracias a análisis y seguimiento, me detectaron hipotiroidismo, tengo antecedentes de diabetes gestacional, antecedentes familiares de diabetes y resistencia a la insulina. Todo esto enmarca mi situación de salud que es diferente a lo que era antes de tener a Fede. Luego de todo esto, mi esposo y yo leímos, averiguamos y decidimos dejar los hidratos. Hicimos dos meses de dieta estricta sin comer harina, azúcares, papa, arroz, choclo ni calabaza. Luego comenzamos a incorporar calabaza (una vez por semana), harina integral y arroz integral. No superamos los 50 / 60 g. de hidratos por día ni las 1500 calorías.
Es un sacrificio, no les digo que no pero lo pude hacer... siempre pensé que no podría vivir sin harina y sin papas pero acá estoy.
Por esto cuando me preguntan qué hiciste, les hago todo esta historia para que cada uno comprenda que no hay muchas magias, los resultados de la dieta provienen de mi historia anterior (siempre fui una persona delgada), de mi historia actual (me cambio el metabolismo y tengo temas de salud) y de la correcta recomendación de mi doctora Isabel para orientarme en qué hacer.
Como recomendación y si no tienen ninguna patología que los limite en qué comer, cuidarse en los tamaños y en la calidad de la comida es vital. Yo aprendí mucho de esto en Dieta Club, cosas que aún aplico en la comida de todos los días y me sirven. El resto es ponerse una meta y seguirla a conciencia y siendo realista. No pretendas llegar a los 50 kilos de los 20 años. Si tu peso de equilibrio es de 65 kilos es mejor concentrar tu esfuerzo en mantenerte sano y activo que en bajar con un sacrificio que te vuelva infeliz. Veo en la calle hermosas mujeres talle XL!
Si la vida te da limones, hacete una limonada y comete un paquete de chipa por mí!



Besos. Criss.